domingo, 7 de abril de 2013

MUSICOTERAPIA EN LA REEDUCACIÓN DE NIÑOS CON PROBLEMAS DE LENGUAJE

Hola de nuevo.

Aquí os presento un artículo interesante sobre la musicoterapia, la verdad no se donde lo consegui, esta realizado por una maestra de educación especial, la cual comenta lo bueno que es la musicoterapia para niños con problemas del habla, entre ellos la tartamudez.

Espero vuestros comentarios.

Saludos Cordiales


Musicoterapia en la reeducación de niños con problemas de lenguaje.

(The music in the rehabilitation of children with language problems)

Estefanía Rosales Sánchez_Maestra de Educación Especial

La Musicoterapia es un medio de rehabilitación que incide tanto desde el punto de vista puramente fisiológico, como puede ser la ejercitación de la voz, movimiento, etc., como desde la perspectiva emocional e intelectual que proporciona un desarrollo afectivo y cognoscitivo. La dinámica planteada de modelos melódicos y rítmicos, influye en el desarrollo del habla intencional. El niño disminuido puede hallar más simple y atractivo el invento o la ejecución de
una melodía, que la expresión simple de una palabra o de una frase. Para él, cantar o realizar juegos de expresión musical y rítmica, representa un medio de expresión de gran valor emocional y placentero. Las repeticiones verbales y algunos de los ejercicios propuestos en logopedia, les cansa o le aburren.
Sin embargo, las actividades rítmico-musicales le agradan.
Entre ellas podemos mencionar:
- Juegos en eco.
- Discriminación de sonidos y ruidos.
- Juegos con los parámetros musicales: tono, intensidad y timbre.
- Pregunta-respuesta rítmica, melódica e instrumental.
- Melodías y canciones con diferentes formas musicales.
- Educación de la voz: ejercicios y juegos con los labios y lengua, silbar, efectos sonoros con la voz, inflexiones, control, volumen, vocalización, entonación, etc.
- Realización de prosodias, cuentos musicales, poesías, poemas, refranes, retahílas, adivinanzas,…
- Juegos y canciones con movimiento y expresión.
- Bailes y danzas infantiles y folclóricas.
- Juegos con percusiones corporales.
 -Interpretación de canciones y acompañamiento de las mismas, con instrumentos musicales.
 -Juegos rítmicos y melódicos con instrumentos musicales.
 -Adiciones musicales adecuadas y con una finalidad específica.

Los trastornos del lenguaje nos interesan desde la perspectiva de la Musicoterapia, por las posibilidades de recuperación que encierran los diferentes ejercicios que proponemos y que se centran en:
1) Una correcta articulación, puesto que los problemas que presentas estos niños de sustituciones, omisiones, adiciones, distorsiones de sonidos hablados, etc., podrían ser superados.
2) Una adecuada vivencia del tiempo y el ritmo, ya que las dificultades de tiempo de emisión de las palabras y un ritmo y acentuación correctos, son problemas usuales en algunas deficiencias del aula, por ejemplo el tartamudeo.
3) Una idónea emisión y educación de la voz: suelen presentarse anormalidades en la altura, intensidad, o cualidad de la voz en muchos de estos niños. El descontrol del aire o la falta de ritmo, podrían ser reeducados hasta donde las posibilidades lo permitan.
4) La simbolización y las dificultades de formulación, comprensión y expresión de los significados, podrían ser recuperados a través de la escritura musical, el canto y otras actividades musicales.
Presentaremos brevemente las deficiencias que consideramos más representativas como orientación para seleccionar con acierto las actividades musicales.

1.1 Afasia.
La afasia es un trastorno grave y complejo del lenguaje, que tiene su origen en una patología orgánica en centros específicos del cerebro, y se caracteriza por un deterioro completo o parcial de la comprensión, formulación y empleo del lenguaje; existe una gran dificultad con la función simbólica.
La afasia priva al que la padece de su capacidad para hablar, comprender, leer o escribir, pero no afecta al restante de sus capacidades, sólo altera el área del lenguaje.
El niño afásico no puede desarrollar una conducta que tenga relación con la utilización de símbolos, en muchos casos no aprender a hablar de modo efectivo, pero sin embargo pueden cantar. Esta forma de expresión les produce una gran satisfacción. Una terapia que tenga como fin el desarrollo y recuperación de la capacidad de hablar, atendiendo a la comprensión y extensión de los significados, ha de tener muy en cuenta la capacidad de rehabilitación que puede obtener a través de la utilización de modelos melódicos para aumentar las unidades elementales de habla intencional con niños graves.
Se ha podido demostrar que ejercicios de labios y lengua que eran reforzados mediante canciones y otras actividades musicales y rítmicas, han sido de gran utilidad para la recuperación de niños afásicos. Hemos de observar que a veces se produce una falta de respuesta al estímulo rítmico o melódico, esto no quiere decir que el niño no perciba el sonido, puede ser que el mecanismo a través del cual debería producirse la respuesta, sea defectuoso, que exista algún canal o conexión deteriorado.
A la hora de seleccionar canciones para niños afásicos, debemos considerar las siguientes condiciones:
- Canciones con pocas palabras, fácil construcción de la frase y con un ritmo simple y regular.
- Utilización de tempo lento, pero con agilidad suficiente como para incitar a la acción.
- Presentación de las ideas principales y palabras, mediante recursos audiovisuales.
- Exposición clara de la canción, delimitando frases, inflexiones melódicas, clara pronunciación de las palabras,… cantadas por la musicoterapéuta.

1.2 Dislalia.
Trastorno de la articulación verbal debido a deformaciones o lesiones de los órganos de fonación: lengua, dientes, labios, paladar,… Este trastorno de la palabra está limitado a la falta, omisión, sustitución o alteración de un pequeño número de sonidos o fonemas.
Atención especial merece la recuperación mediante ejercicios de ritmo y prosodia, discriminación auditiva e interpretación de canciones.

1.3 Dislexia.
Es una dificultad durable del aprendizaje de la lectura y de la adquisición de su automatismo en los niños normalmente escolarizados. Se manifiesta en inversiones del orden u omisión de letras o sílabas, y se acompaña a menudo por una disortografía. Coinciden con dificultades de lateralización, de orientación en el espacio y en el tiempo.
La reeducación en cualquier edad es de vital importancia: el objetivo no es hacer un nuevo aprendizaje de lectura, sino modificar el sistema de pensamiento del niño. Para ello insistiremos en la organización espaciotemporal, la integración del esquema corporal y la práctica rítmica.
Muy adecuados para una recuperación eficaz, serán los ejercicios y actividades relacionadas con:
- El movimiento y la danza.
- Canciones sobre el esquema corporal que se acompañan con acciones, gestos, recorridos,…
- Manipulación de instrumentos
- Ejercicios de grafomotricidad y ritmo.
- Prosodias con frases, retahílas, adivinanzas, trabalenguas, refranes,…
- Juegos y cuentos musicales.

1.4 Tartamudez.
Es un trastorno de la fluidez del habla, de la facilidad y rapidez para expresarse. Consiste en un fallo rítmico y temporal en el habla, sin alterar para nada otros aspectos lingüísticos o gramaticales como sintaxis, vocabulario, fonología, etc. Sólo la arritmia y disritmia se refieren a la interferencia fonética con los ritmos normales del habla. Este trastorno se traduce en la imposibilidad en ciertos momentos, de emitir o encadenar ciertos sonidos. Se agrava con
ansiedad y cuando el niño presta atención a lo que quiere decir.
La tartamudez produce un desorden en el ritmo general, y por lo tanto el niño con este trastorno, padecerá de un sentido del ritmo menos desarrollado. Los trabajos de ritmoterapia son los más adecuados para él, así como los de canto, ya que no suele tartamudear mientras canta. Es muy interesante el trabajo en grupo, pues cuando se haya integrado en el mismo, disminuye la ansiedad y las defensas individuales, obteniendo por lo tanto un mayor grado de
comunicación, al realizar entre todos unas actividades que proporcionan gran satisfacción y placer.
La reeducación de la tartamudez mediante la Musicoterapia consistirá en:
- Ejercicios prosódicos y melódicos con la voz: palabras, frases, ritmos, entonación, recitativos acompañados de instrumentación, interpretación de melodías y canciones,…
- Movimientos y danzas.
- Audiciones musicales. Los ejercicios de relajación motivados con una música seleccionada adecuadamente, pueden considerarse como muy idóneos, puesto que se requiere que el niño guarde silencio. De esta manera, conseguiremos que se olvide de sus problemas, creando un
clima de tranquilidad y sosiego que actuará como tranquilizante, y le predispondrá positivamente para las sesiones de reeducación y terapia.
- Montaje de juegos dramáticos y musicales, con intervención de efectos sonoros con la voz, frases melódicas, etc.

Referencias bibliográficas.
a) Libros:
-Benenzon, R. (1981). Manual de musicoterapia. Barcelona: Paidós.
-Lacarcel, J. (1990). Musicoterapia en la Educación Especial. Universidad de Murcia.
-Lou, M.A., López, N. (1999). Bases psicopedagógicas de la Educación Especial. Madrid: Ediciones Pirámide.


1 comentario:

  1. La musicoterapia va fenomenal para que los niños experimenten mejoras en su forma de ser y en su desarrollo ya que les ayuda mucho a corregir muchos de los problemas que tienen, muy interesante el artículo

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Muchas gracias por tu comentario,